Monday, March 8, 2010

Laberinto

Perderme en tu carne húmeda y frágil

huesos crujir en el silencio intacto de una noche tumefacta

y que cada tacto sea un solo morir lento

un rebatir de alas entre espuma y saliva

que mi corazón cante con un pulsido lento y agitado

lento y agitado

con mis dedos rasgar lo más profundo de tu ser dentro de mí

volar por el párpado cerrado de tu ombligo y salir disparado de tu nariz y volver a entrar por tu boca

que u hilo de saliva delpasiano os una en un momento fugaz

oroplumeando en rasgadueras oropéndolos águdos,

cayendo lento

lento

lento


en un pozo lleno de rabia y engendronsos caicaronas oscuras

que iluminan con sus dientes el paso del águila desplumada

y nadar, nadar en la nada de la nadágada alberca del fondo,

donde te vuelvo a encontrar,

y me abrazas

y nos olemos en el pelo el olor a aire y a nubes, a orgaminios densos de cantrorios fervientes


Perderme una vez más

y morir.

Poesía es

Con una mirada dulce,

te recuerdo,

recuerdo el vaivén de tu pelo sobre la almohada

cuando con mi respiración se agitaba.

Te recuerdo y no sé qué hacer

porque un extraño hilo de saliva me ata a esta silla

lejana de tu lugar,

que aún conserva, asombrosamente, un poco de tu calor.

No sé si esto dentro de mi es amor

ni sé siquiera si es querer,

pero nada me detiene de pensar en ti a cada momento.

Con un dulce sabor a flor primaveral

y un olor suave de amarillo pálido,

te veo

sentada frente a mí,

con esa sonrisa un poco torcida, casi una risa completa,

y esos ojos que me atrapan, me hacen ignorar a todo y a todos

-eres un peligro, mujer, eres un peligro-

porque no puedo evitarlo, no puedo.

Y, si cada verso que escribo se perdiera

y cada fotografía se quemara

¿qué?

¿Un árbol deja de ser árbol si no hay más árboles a su alrededor?

¿Un ave se sabe ave si nunca ha visto otra?

No lo sé, cariño, no lo sé

pero, tómate otra botella conmigo

y lo averiguaremos.

Quiero confiar en mí pero no puedo

no me basto

un solo verso me basta pero yo no.

Quiero contar conmigo, saberme aquí

pero mi presencia me resulta eludible

me resulto extraño.

Aún cuando aspiro el cigarro

aún cuando bebo la cerveza

no estoy.

Quiero escribirme pero no me encuentro

no me veo

apenas y me puedo inventar.